"Dont give up cause I believe there's the a place where we belong". Peter Gabriel
Extiendo mi mano a las putas
dignas dueñas de su alma
al buscador de tesoros en la basura
al que duerme en la calle
y sueña con una cama en el cielo
al viejo vagabundo de hedor insoportable
al niño perdido en un mar de limosna
regenteado por sus propios padres
al acróbata de circo que se estrello en un semáforo
al que alguna vez comió en un restaurante de lujo
hasta que despertó en medio de la oscuridad absoluta
al que ligó palos de quien se suponía debía amarlo
al abuelo ignorado en la mesa de todos los días
al que creía tener la partida ganada y se encontró
en el callejón sin salida del jaque mate
al que sufre, sufrió y sufrirá tan solo por ser distinto
al que se pregunto una y mil veces ¿Por qué a mi?
para levantarse
encontrar un nuevo obstáculo
y seguir obstinado en busca del horizonte
extiendo mi mano
al que sigue tirando monedas a la fuente
a pesar de no haber cumplido ningún deseo
al hombre herido que sonríe
cuando debería llorar
al que piensa tanto en los otros
a riesgo de olvidarse de si mismo
al eterno enamorado que soy
sin disculpas ni atenuantes
al ciego que sabe mirar con el corazón
al preso que vuela con su pensamiento
mucho mas que los supuestos libres
al que escribe sin buscar fama ni reconocimiento
tejiendo historias y poesías para no morir
al que luego de putear a Dios de lo lindo
supo creer en si mismo
al marginal marginado
que cansado de tropezar una y mil veces
con el desprecio de los otros
restregó sus ojos ardientes
busco dentro suyo
y aprendió a quererse.
Paulo Prella
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