Es extraño que tu ausencia
es indiferente al mundo que te sobrevive
sin embargo estoy seguro que nos dejaste
a todos un poquito mas huerfanos
Uruguay sigue ahi
junto a tus poemas de otros
las niñas que alegran el dia
con su paso irreverente
los refugios que aprendiste a querer
desde el exilio tambien permanecen
las viejitas democraticas, el ministro que se rie
el torturador y su espejo
los pobres tiranos caseros, buitres helicopteros
el señor molusco caballero lapa
que te perdio la pista
para siempre
en algun rincon alguien todavia
espera a su amada con un cafe caliente
alguien llora un final previsible
mientras un niño se maravilla
al escuchar de su madre
la poesia que aun
no sabe leer.
Paulo Prella
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